Hoy en Bruselas hay heridos de guerra en los hospitales. Hoy hubo gente que murió a causa de explosiones.
El país donde vivo está en guerra. El estado está en guerra.
Fanatismo, hambre de dinero y poder, detrás de estos seres que pregonan religión.
El pueblo sufre las consecuencias, como en toda guerra. Muertos en Francia, en Bélgica, en Libia, en Pakistán, en... Periodistas americanos asesinados frente a cámaras.
Hoy, mientras estaba trabajando normalmente en el laboratorio mi mamá me avisó que hubieron atentados en Bruselas. La radio publica los discursos de todos los presidentes, reyes y figuras políticas. No es verdad, no van a detener el terrorismo, proponer la guerra a los más expertos guerrilleros actuales, no veo la victoria. Mientras tanto innumerables víctimas padecen este enfrentamiento que los directivos dicen querer dominar. Cuántas personas murieron en suelo sirio a causa de ataques franceses? No lo sé.
Vuelvo en bicicleta, tranquilamente por la calle Jean Jaurés escuchando la radio. El mundo entero solidarizado con Bruselas, sin embargo, qué esperábamos? Qué creemos? Que el estado tiene el control? Obviamente no, y no lo tendrá. Francia, Bélgica, EEUU seguirán atacando y sus pueblos seguirán siendo permeables a los asesinos.
La libertad y la democracia han sido agredidas. Juntos vamos a destruir el terrorismo. Juntos, quiénes? Yo, vos? El señor que estaba despachando su valija, o aquél que viajaba en metro? Cómo?
Almorzando esta semana con mis compañeros del laboratorio, uno de ellos que es padre comentó que su hijo mostraba deseos de ser periodista, PERIODISTA? NO! muy peligroso!, reaccionaron todos. Hoy, ser periodista en Francia es uno de los trabajos mas riesgosos que existen.
Los refugiados sirios, familias enteras llegando a Europa escapando de la guerra, llegan a la misma guerra de la que huyen. Su tristeza, el dolor de dejar su tierra amada, cultura, historia, por un porvenir también teñido de guerra. Hoy, los refugiados son las personas más desoladas.
No puedo dejar de pensar en esta guerra y en la actitud de cada ciudadano de seguir adelante con la vida y en mi actitud de continuar como si todo fuera normal. Qué puedo hacer? Cómo reaccionar ante este monstruo?
Yo no estoy fuera de esta guerra, estoy dentro. Cómo puedo estar segura de que mañana la avenida Jean Jaurés estará tranquila? No estoy segura.
Desde mi lugar, mi accionar es minúsculo, así como frente al hambre y a la miseria humana.
Solamente continuar manifestando mi visión: no es una guerra religiosa, ninguna NINGUNA religión proclama el mal ni la muerte (si los hombres). Es una cortina que cubre intereses ya conocidos por la humanidad. No culpemos a los musulmanes, culpemos a estos hombres delirantes ambiciosos de poder.
Es la guerra la solución ante la guerra?
Cuál es la solución?
La historia declara que las guerras han continuado hasta que un bando gana y el otro pierde. Será este el destino de esta guerra?
Estoy destruida, como todos. Pero no creo que más que aquellos que perdieron a un familiar hoy, o en otros ataques.
No comments:
Post a Comment